Carlos
Moro
Presidente Matarromera
El crecimiento solo puede venir por la creación de más empresas, el fomento de los empresarios, el emprendimiento y colocar al empresario en el centro y motor del desarrollo económico y social.
Enhorabuena a CEOE por organizar este estupendo congreso de líderes del futuro. Y también quiero tener un recuerdo con las víctimas, las personas que han tenido sufrimiento en estos meses, y solidarizarme con ellos. Pero también quiero felicitar a mis colegas del sector agrícola y del sector alimentario que tan fantásticamente han logrado que en España haya habido un permanente suministro y acceso a todos los productos alimentarios.
Mi perspectiva va a ser la de un pequeño empresario, pero quizá de una empresa, -Bodega Familiares Matarromera-, que tiene cierta complejidad y en la que participamos en distintas áreas del sector: el vitícola, por supuesto en especial, pero también estamos presentes en el oleícola, los destilados y en el ámbito de la hostelería y el turismo.
Permítaseme primero que hable un poquito, a nivel general, de la industria alimentaria, a la que he dedicado toda mi vida desde distintas perspectivas. Ya hace tiempo, cuando yo estaba en otros ámbitos, que se consideraba la industria alimentaria, el sector agroalimentario, como algo básico y fundamental, y muchas veces se ha discutido si era una política de Estado la que tenía que reflejarse en este sector. Pero desde luego en este momento, en el que estamos hablando de futuro, estamos hablando de posibilidades.
No me voy a referir a los aspectos horizontales, que han sido suficientemente tratados y muy bien, sino a los aspectos más específicos que tienen que ver con el sector.
Y desde esta perspectiva, tenemos unas amplias posiciones desde la Unión Europea que hay que utilizar, aprobar y orientar. Y por supuesto, también todo lo que pueda venir en el presente para poder complementar todo esto y lanzar hacia el futuro a este sector, en el que existe un gran número de empresarios, muchos de pequeña dimensión, pero hay también grandes.
Por tanto, el crecimiento solo puede venir por la creación de más empresas, el fomento de los empresarios, el emprendimiento y colocar al empresario en el centro y motor del desarrollo económico y social. La función social del empresario tiene que ser reconocida, y, por tanto, valorada para que haya voluntad, interés e ilusión por el dimensionamiento, por el crecimiento y por ser un elemento de enseñanza y de ejemplaridad.
Para conseguir ese futuro, hacen falta algunos aspectos generales que quiero citar, como es, por ejemplo, la parte de infraestructuras y digitalización. Yo vengo de un pueblecito de 200 habitantes, en el que no me hubiera podido conectar, como otros, por videoconferencia. ¿Por qué? Porque sencillamente no hay prácticamente comunicación, hay un mega de subida y de bajada. Es imprescindible completar de verdad la red de telecomunicación y dar lugar a que acceda todo el sector agrícola y agroalimentario, ubicado en el campo y en zonas menos habitadas, para que pueda tener acceso a todo.
Por supuesto, todo lo que tiene que ver con informatización, pero también con carreteras. Falta completar: hay ejes horizontales, que todavía seguimos sin ellos, y concretar aeropuertos y demás. Y todo eso, enlazado con una adecuada logística, mucho más si queremos acortar la cadena de valor y llevarla prácticamente desde el productor, desde el agricultor o desde el transformador agroalimentario hasta el consumidor final.
Es necesario también un fomento de lo que yo he denominado, en una de mis publicaciones, “la economía esférica”, y ello significa poder contar con todos los medios modernos: correo electrónico, conexiones, vídeo catas, Big Data, inteligencia artificial, … también en el campo de la agricultura y en la industria alimentaria.
El tercer aspecto que quería citar es la formación y el talento, y como consecuencia de ello, el empleo. Es necesario formar adecuadamente a nuestra gente. Cada vez son más sofisticados los sistemas de producción, tanto agrícolas como agroindustriales, y poco podemos hacer si no tenemos personas bien formadas, bien dotadas y con unas retribuciones, por supuesto, acordes al momento actual. Formación dual, liderazgo y gestión de equipos, imprescindible: hace falta tener esta habilidad para crear equipos modernos que sean capaces de gestionar de la forma más moderna también todas las empresas. Y por supuesto, la retención de talento, que tiene que ver a su vez con la retención de la población en el territorio y con evitar la despoblación rural.
Un aspecto en el que nosotros somos absolutamente punteros y creadores es la I+D+i. Creemos que en este sector hay una posibilidad enorme. De hecho, en los últimos 14 años, hemos hecho 100 proyectos de I+D+i, hemos dado. lugar a 14 patentes, y este ejemplo puede y debe replicarse de forma general. Pero para ello hace falta también pensar en los alimentos del futuro, que son los del presente, el ajuste a las necesidades de los cambios sociales, promover desgravaciones fiscales, ayudas, infraestructuras y adopción de los cambios necesarios para que esto se pueda llevar a cabo.
Y por supuesto, funciones y visiones esféricas también de la I+D, interviniendo aspectos muy cruzados. El avance siempre suele ser algo que interfiere, o donde intervienen, distintas visiones de otras personas. Y por supuesto, la colaboración universidad-empresa de forma efectiva.
La comercialización es fundamental. Si al final no logramos llevar al comercio y al consumidor los productos, estamos teniendo una carencia grande. Y para ello hace falta apoyar todos los nuevos sistemas de comercio. La omnicanalidad está más presente que nunca, no es una palabra nueva, ya la utilizábamos hace unos cuantos años, pero ahora se ha convertido en esencial. Todos los canales: el comercio electrónico, los marketplace, el comercio de cercanía, el comercio a través del turismo, etcétera, es necesario complementarlos y fomentarlos.
Pero hay algo que requiere una relevancia especial, que es el fomento del comercio exterior. Hemos dicho que este sector estratégico tiene un gran potencial. Aquí tenemos tierra, tenemos clima, tenemos campo, tenemos personas, tenemos estupendas empresas y podemos tener más, pero tenemos poca población.
Tenemos capacidad y tenemos la necesidad de salir al exterior. Por tanto, esto tiene que ser un factor absolutamente clave, ya no en el sector vitivinícola, donde más me muevo: es fundamental salir y llegar al resto de los 200 países que conforman nuestra colectividad mundial.
Quiero poner aquí un ejemplo que me gusta y que me interesa. Yo he visto muchas veces cuando he viajado, -viajo muy frecuentemente por necesidad-, las actividades que han hecho otros países (Italia, Francia), como la creación de consorcios para la promoción y venta concreta de los productos alimentarios en los países de destino.
Es hora de lanzarse a este campo y empujar la creación de un consorcio público-privado que nos lleve a posicionar nuestros magníficos productos alimentarios, -muchos con Denominación de Origen, con una excelencia extraordinaria-, al resto del país.
Y por supuesto, la colaboración intersectorial. Nosotros estamos en varios sectores y estamos también buscando colaborar. Hemos hecho un plan, Restaurando la vida, que es en definitiva colaborar entre el sector de hostelería, la distribución, la fabricación, la producción alimentaria y demás. Y las Administraciones Públicas devienen sumamente importantes para facilitar todo esto en la calidad normativa, en la definición, en la inmediatez, en la certidumbre, en la concepción del servicio al ciudadano, el acceso digital, -que decía antes-, y por supuesto el mantenimiento y la creación de la PAC.
No quiero dejar de citar de forma general el último punto que es la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente, en el que este sector es un factor importante y puede hacer muchas cosas y ayudar mucho.
En cuanto al sector vitivinícola, es un sector que ha sufrido un poco más que otros en el ámbito del sector alimentario, especialmente los que estamos muy centrados en el canal de la hostelería, donde ha habido una caída y un cierre total también en la exportación.
Quería sintetizar simplemente seis líneas de acción, porque no da tiempo a más. Primero, el fomento del consumo del vino. El consumo propio como un producto alimentario, de calidad, y de todos los tipos de vino. Tenemos una oportunidad extraordinaria en ese campo. El fomento de la gastronomía a través de la agricultura, la alimentación y el turismo. El enoturismo, que se ha citado, o simplemente también el turismo industrial, el oleoturismo o el de otros sectores importantes. El fomento del “Eje 6”, que yo llamo: el eje natural, sostenible, ecológico, saludable, paisajístico y freno a la despoblación. Ahí lo dejo, porque sería objeto de una larga intervención.
Apoyos específicos, por supuesto, el PASVE en el caso del sector vitivinícola, la OCM en el vino, y la PAC son factores que están ayudando, y que son fundamentales, pero sería también muy conveniente complementarlos con dotaciones nacionales para cubrir todos los objetivos deseables.
Medidas de competitividad y unidad de mercado, y ayuda a las inversiones holísticas, en el sentido de todos los conceptos: agricultura, alimentación, comercio, turismo, ecología, sostenibilidad. Por tanto, en este sector y en los demás hace falta un plan de I+D+i, de marketing general, de energías renovables, de retención del talento.
Y, por último, citar simplemente el hecho de la intensificación de la exportación, con nuevos y más sofisticados mecanismos. Los anteriores hay que mantenerlos, pero hay que ampliarlos, añadirlos, hay que buscar sistemas mucho más sofisticados. Y la colaboración público-privada, potenciar la nueva economía digital: marketplace, eliminación de restricciones, aranceles de EE.UU., Brexit, …, ya se han citado.
En conclusión, aprovechar las acciones de ayuda y de medios y fondos que puedan venir de Europa y nacionales, para una acción determinante en fomento de la exportación con la colaboración público-privada. Segundo, una mejora de la competitividad para la dotación de infraestructuras y la digitalización y modernización. Y tercero, resumiría, la apuesta por la sostenibilidad medioambiental y la economía esférica. Muchísimas gracias por escucharme.