Santiago
Aparicio

Gracias, presidente. Buenos días a todos. En primer lugar, permítanme que haga un recuerdo a los fallecidos, un apoyo a las familias de los fallecidos y, sobre todo, querer citar aquí también a los que han estado en primera línea. A todos los sanitarios, a todas las empresas esenciales que han hecho el trabajo para que los demás pudiéramos estar tranquilos en nuestra casa y pudiéramos estar trabajando allí donde estuviéramos.

En segundo lugar, quiero felicitar a CEOE, a su presidente, Antonio Garamendi, y a todo su equipo por la cumbre que se está desarrollando y que hoy tiene su culmen. Realmente creo que ha sido importante, ha sido interesante, por la cantidad de cosas que se han dicho aquí que van a poner en valor lo que hacemos los empresarios, que realmente es mucho y somos parte de la solución.

Estamos en una situación inédita, en una situación de crisis de demanda y de oferta, pero todo no es malo. Creo que hay que sacar conclusiones y hay cosas que realmente son buenas, ha tenido aspectos positivos. Han tenido un papel clave las empresas, creo que vamos a ser parte de la solución. Ha traído un desafío en la digitalización y una apuesta por la sostenibilidad y la economía verde. Son puntos estratégicos en los cuales debemos empezar a creer y debemos empezar a trabajar. Desde esta casa se ha hecho muy bien con el tema de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Castilla y León es, -antes decía Javier González de Lara que Andalucía era la región más grande de Europa en población-, la más grande de Europa en extensión, con 2.600.000 habitantes y con una extensión de 95.000 kilómetros cuadrados. Tenemos, por así decirlo, frontera con nueve Autonomías de las 17 que tiene este país.

Castilla y León tiene unas potencialidades tremendas por la situación que tiene y por la extensión que tiene. Fundamentalmente, el sector agrícola y ganadero es de los sectores más potentes, más pujantes, pero Castilla y León tiene que aprovechar que realmente de todo lo que se produce allí, el valor añadido, se quede en Castilla y León, porque actualmente no llega ni al 45% de la transformación de esos productos.

Hay que llevar la digitalización a este sector, creo que poco a poco está entrando: los tractores GPS, están entrando los drones y otros sistemas para contar fruta, para contar las toneladas de cereal que se pueden conseguir, para ver cómo está la cosecha de uva… Creo que es importante que en Castilla y León se está entrando en esa digitalización de ese sector.

Tenemos un sector muy potente en materia industrial, como es el sector del automóvil, que es de los sectores que peor lo está pasando, junto con el turismo. Realmente, el anuncio hace pocos días por parte del presidente del Gobierno de esas ayudas al sector del automóvil creo que es importante. Dentro de esas ayudas es importante la parte que hay para formación, pero muy importante la parte que se destina a I+D+i. Es clave la I+D+i en el sector del automóvil en España, para que no dependamos de las decisiones que se toman realmente en donde están las sedes sociales de esas empresas, porque siempre vamos a estar con esa espada de Damocles en el sector del automóvil por las decisiones que se toman allí. Si tenemos I+D+i, si tenemos esa capacidad de innovar, de investigar en el sector, realmente esa espada de Damocles, poco a poco, irá desapareciendo.

En Castilla y León, tenemos el sector turístico, el turismo de interior, con más del 50% del patrimonio histórico artístico de España dentro de Castilla y León. Tenemos cuatro ciudades Patrimonio de la Humanidad. Tenemos el español como la enseñanza básica, realmente eso atrae a cantidad de extranjeros y es una industria muy potente dentro de Castilla y León.

Pero para potenciar todos estos sectores, para potenciar el sector de la energía, -que somos líderes en el sector eólico a nivel de España-, hacen falta realmente una serie de medidas. La financiación autonómica debe cambiar, porque tenemos 2.600.000 habitantes contra 95.000 kilómetros cuadrados. Esa financiación autonómica de la que hablaba el presidente de los empresarios de Valencia; allí nos vemos también un poco como ciudadanos de segunda y como ciudadanos casi de tercera. Porque la gente que vive aislada en la mayoría de los pueblos necesita también del apoyo de las instituciones y de esa sanidad pública para que realmente se vean total y absolutamente atendidos.

También necesitamos una armonización fiscal, porque realmente Castilla y León está sufriendo una sangría tremenda de huida de empresas de su comunidad por no tener un impuesto de sucesiones y donaciones bonificado, por no tener un impuesto de patrimonio que también esté bonificado como estén en otras comunidades autónomas. Creo que eso es fundamental para poder alcanzar el culmen de las empresas en Castilla y León.

Y también algo muy importante, hay que poner en valor de una vez por todas y hay que empezar a utilizar la ley de unidad de mercado, esa ley que se hizo y que tanta competitividad nos puede dar a los empresarios españoles que no la estamos poniendo en valor, no la estamos utilizando por motivos partidistas y también por motivos de gobiernos autonómicos que no quieren ponerla en valor, cuando realmente nos ahorraría más de 45.000 millones a las empresas españolas y nos haría que fuéramos más competitivas.

Y sí que quiero resaltar antes de acabar, presidente, lo que ha sido -y lo que sigue siendo- el diálogo social de Castilla y León. Creo que el diálogo social de Castilla León, si bien es conocido, la OIT nos lo ha reconocido como uno de los diálogos sociales más potentes y que han resuelto más problemas a nuestras empresas y a nuestros ciudadanos de Castilla y León. Llevamos más de 100 acuerdos aprobados, todos presupuestados y todos con un seguimiento, que han beneficiado mucho tanto a las empresas, como a los ciudadanos.

Y en esta situación de estado de alarma, el 25 de marzo firmamos un acuerdo que creo que fue de los primeros acuerdos que firmó dentro del diálogo social en España que realmente ha puesto en valor una serie de ayudas en materia social, en materia sanitaria, en materia de empleo -que es fundamental- y también en materia económica. Creo que eso hay que reconocérselo también al Gobierno de Castilla y León, a su presidente anterior, que fue el que lo impulsó, a Juan Vicente Herrera, y al actual presidente, que también está siguiendo por ese camino. Creo que es algo fundamental.

Creo que con todas estas medidas y todos de la mano saldremos, y a España la pondremos donde realmente merece estar, como ha estado hasta ahora. Gracias, presidente. Gracias a todos.